Descubre los PLUMIERES de MADERA más originales

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Defectos de la madera: Secado, hongos y mohos

Toda madera al aire libre está expuesta a los cambios de temperatura y a los efectos del sol, lo que influye negativamente en la superficie de la madera. 

  • Lanulados: Anillos o capas concéntricas de madera muerta en medio de otros de madera viva. Este defecto se produce como consecuencia de fríos intensos que impiden el desarrollo de la planta al obstruir el paso de la savia.  
  • Deformación: La madera, una vez aserrada, sufre una deformación, pues el encogimiento en el sentido tangencial es aproximadamente el doble que en el sentido radial. Las tablas cortadas tangencialmente se curvan formando un hueco en la parte externa, puesto que la madera es más escasa en la parte exterior que en la parte interior.
  • InsensibilidadCuando la madera seca, las caras exteriores lo hacen antes que la parte interna. Esto da lugar a una tensión que se ve restringida por el encogimiento de la parte interna más húmeda, adquiriendo pues más estabilidad. Esto es lo que se conoce como insensibilidad, la cual puede agudizarse por un secado muy rápido que siempre se puede dar en los maderos más gruesos.
  •  PandeoSe produce por una acción de secado rápido, pues se crea una tensión entre el agua contenida en el interior de las células, comprimiendo sus paredes unas contra otras, dando lugar a distorsiones y encogimientos anormales que suelen traducirse en una corrugación que se conoce con el nombre de tabla de lavar.
  • Apanalado o agrietado: Las grietas también podrían ser defectos naturales. Tiene lugar cuando se producen muchas grietas en la madera, resultado de la tensión creada tanto por el pandeo como por la insensibilidad. Las grietas son aberturas que se producen desde dentro hacia fuera y aparecen en la madera en distintas orientaciones y magnitudes, mermando la resistencia de ésta. La desecación rápida es la mayor causa de grietas.




 Defectos de origen patológico

  • Rajas y fendas: Una raja es una grieta que se extiende en profundidad, en tanto que una fenda atraviesa de una cara a otra del madero. Las fendas se producen particularmente en los extremos de las maderas duras, muy densas, siempre y cuando no haya protección durante el secado. 
  • Doble albura: Defecto que se produce como consecuencia de las heladas en las maderas frondosas. Las células heladas de la albura pierden la facultad de transformar el almidón en las sustancias tánicas necesarias para la formación del duramen, por ello, este defecto se manifiesta como una interrupción de la madera del duramen dando la apariencia de una doble albura. La consecuencia de este defecto es puramente ornamental y no supone una depreciación de la pieza de madera. 

Hongos y mohos de la madera

A pesar de que son bastantes los hongos que pueden afectar a las distintas especies de madera, toda pudrición producida por hongos tiene una serie de caracteres comunes: cambio de color y textura, reducción de la densidad, debilitamiento y cierta pérdida de resistencia.

De forma general, podemos hablar de: 
  • Pudrición parda: Anula la celulosa y deja una estructura cúbica color pardo que se puede desmenuzar, presentando grietas en el sentido del veteado.
  • Pudrición blanca: Ataca a la lignina y a la celulosa, pero no tiene tantos efectos nocivos sobre la madera como la anterior.

Cualquiera de los dos tipos de pudrición se puede presentar en forma de manchas o en forma de bandas sobre la madera, o también en forma de líneas marginales de tono oscuro alrededor de la línea afectada.
La pudrición en la madera puede aparecer tanto en la madera trabajada como en la almacenada, así como en el árbol en crecimiento y en el árbol ya talado. Los ambientes húmedos son prolijos a la aparición de hongos que se manifestarán en las piezas por distintas coloraciones que aparecen en la madera. Estas coloraciones se producen en función del hongo que ataca. El efecto fundamental de un ataque de hongos es la descomposición de la madera. Tanto las temperaturas extremas, como la escasez de luz y ventilación, favorecen el desarrollo de estos mohos. Esta madera se agrieta y despide un olor desagradable.

Pudrición en edificios y estructuras

Hongo seco (merulius lacrymans): Se desarrolla fundamentalmente Europa, en maderas con un contenido de humedad entre el 30% y el 40%, origina una pudrición parda en forma de cubos, ataca principalmente a las madera blandas, pero en menor medida las maderas duras también se ven atacadas. Nunca se desarrollan en maderas que tengan contenidos de humedad menores del 20%.

Aparece en obras de madera, en toda clase de materiales leñosos, en las alfombras y el papel. Su peligro ha llevado a que esté regulado por disposiciones legales. Así, cuando los elementos portantes de madera en construcción resultan atacados, debe comunicarse a la comisión de urbanismo del  ayuntamiento correspondiente. Se trata de un hongo muy peligroso, pues tiene unos cordones con los cuales transportan a la madera seca el agua necesaria, aunque esté distante a varios metros.

El hongo se puede infiltrar también a través de los ladrillos, lugar del que la eliminación es bastante complicada. En estos casos se tiene que sustituir la madera afectada corrigiendo previamente el contenido de humedad. En ocasiones se aconseja no sustituir algunas partes de madera afectada con madera, sino con un material distinto.

Moho verrugoso o moho de bodega: Se trata del hongo húmedo por antonomasia. Sólo se desarrolla en edificios en los que existe un alto contenido de humedad y madera nueva. Ataca tanto a las maderas coníferas como a las frondosas.  El hongo ocasiona una pudrición pardusca y cúbica similar al hongo seco. El tratamiento es más fácil que con el hongo seco, pues éste no sobrevive si no se dan grandes condiciones de humedad y no penetra en los ladrillos.

Moho poroso blanco: Aparece tanto en la madera almacenada como en las maderas de obra, originando una podredumbre de color pardo y una rotura cúbica de la madera en las superficies afectadas. Ataca fundamentalmente a las especies coníferas y en pocas ocasiones a las frondosas. Quitando el contenido de humedad de la madera desaparece el moho, pero el problema está en que incluso pasados los años, si la madera volviera a humedecer, el moho podría volver a reaparecer.

Phellinus megaloporus: Ataca a las maderas duras cuando se encuentra en condiciones de extrema humedad. Se trata pues de un hongo parecido al anterior. Es el causante de una pudrición blanca muy extendida por  Europa y a la que hay que asociar la putrefacción de las estructuras de robles en los edificios. Es fácil combatirlo, pues únicamente prospera en condiciones de extrema humedad y no penetra en los ladrillos. Bastaría con cambiar las condiciones de temperatura para la eliminación total del moho.

Amanita del abeto y de los cercados: Atacan a las maderas coníferas y son los más peligrosos que existen para la madera aire libre. Estos hongos precisan de un alto contenido de humedad para poder desarrollarse, pero al igual que el moho poroso blanco, en caso de desecar la madera, entran en estado anhidrobiosis, permaneciendo así durantes años, pero en el momento en que se den las condiciones de humedad que garanticen su desarrollo vuelven a atacar a las maderas coníferas.
Sus primeros indicios son unos teñidos rojos por áreas o rayas, pero durante mucho tiempo la madera se presentará sana por fuera aunque por dentro esté destruida. Este tipo de pudrición se puede producir en un almacén cuando las maderas han estado en contacto con el suelo, pero también pudiera aparecer en el marco de una ventana cuando estuviera en contacto con una pared húmeda.

Corazón hueco: Se produce en los árboles viejos cuando se desecan. Al desintegrarse los anillos, se desarrolla un virus que acaba con el corazón del árbol, dejándolo hueco. Este fenómeno se conoce también con el nombre de pudrición roja y se produce de un modo más notable en el haya (se denomina corazón rojo del haya).

 Manchas de hongos

 Hongo azul: Muchos son los hongos que producen manchas de tonos azulados en las maderas blandas y en algunas duras. Atacan a los árboles frondosos y a las coníferas, pero fundamentalmente a la albura del pino silvestre; la madera de pino recién cortada puede en pocos días teñirse de azul. Las manchas casi siempre quedan circunscritas a la albura, aunque en algunas maderas blandas también se presentan en el duramen. Se produce por la descomposición de los cuerpos albuminoides de la savia bajo la acción de los hongos.La mancha tiene poca importancia en lo que se refiere a la compresión  o a la resistencia al pandeo de las maderas, pero reduce en cierto modo la dureza y resistencia a los posibles impactos sobre la madera.

Roble pardo: El duramen del roble resulta afectado por un color uniforme debido al hongo fistulina hepática que penetra en el árbol por las heridas que éste pueda tener. La resistencia de la madera apenas queda afectada y con una desecación de ésta el hongo queda eliminado. Animales como los rumiantes al comer del árbol abren unas heridas que son la vía de entrada de todo tipo de insectos y mohos. Especialmente dañinos son también los conejos, liebres y ratas. 

Madera verde: Se trata de una mancha verde de color intenso que tiene poca importancia para la resistencia de la madera. La madera que ha sido atacada por estos hongos se suele usar para la marquetería y la taracea.

 La pudrición por hongos, con excepción de un reducido número de especies, está directamente relacionada con su contenido acuoso. Las maderas que no tengan más de un 20% de humedad no tienen peligro de verse atacadas por hongos. Igualmente los muebles y maderas en exteriores no tienen peligro de pudrición si están bien ventilados y si con las patas no tocan el suelo.


Cuando la madera no tiene una duración larga de forma natural habrá que añadirle un preservante y, además, toda estructura debe ser proyectada de tal manera que no entre en contacto con el agua. La madera seca afectada de pudrición parcial o total no debe ser usada en carpintería pues se ven afectadas sus cualidades de resistencia; en cambio cuando se ven afectadas por manchas son generalmente superficiales y es una cuestión de apariencia.


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